Uno de los aspectos fundamentales radica en la información. Los medios de comunicación tienen una función persuasiva; pretenden arbitrar el control social sobre el conjunto de los individuos. Los medios son los grandes árbitros de la conducta económica, política, ética y psicológica. Son uno de los grandes recursos utilizados en la forja de las nuevas aptitudes que adaptan a los individuos a las situaciones que van creando.
En la antigüedad, el hacerse con el control social ha estado apoyado con el uso del poder. Cuando el poder deja de ejercerse por la fuerza, nos encontramos en unas sociedades evolucionas cuyo funcionamiento necesita de intercambio de ideas.
En estas sociedades, los métodos para obtener la adhesión social serán necesarios para obtener la participación voluntaria en el desarrollo del sistema económico.
La PERSUASIÓN es, por tanto, uno de los fenómenos centrales en el funcionamiento de las nuevas sociedades.
Grecia del siglos V a.C. marca el modelo originario de las sociedades europeas contemporáneas. En ella la palabra hablada/escrita gano unas proporciones de importancia considerables en la defensa de la democracia. Dentro de este contexto, existían unos individuos que sobresalían en el arte de la palabra y el hecho de emplear bien la palabra se convirtió en valor fundamental para todo el que tuviese ambiciones sociales y políticas. Se llamaban sofistas: utilizando la retórica (persuadir) como procedimiento utilizable para obtener la adhesión social.